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Del quirófano para el quirófano.
Hoy hablamos de la tabla rígida durante RCP intraoperatoria: herramienta útil y contextual, nunca la protagonista.
3 ideas clave
Superficie firme: convierte fuerza en desplazamiento esternal útil (5–6 cm con retroceso completo).
Continuidad: si colocarla implica >10–15 s de pausa, no vale.
Brújula fisiológica: decide mirando EtCO₂ (ideal ≥10–15 mmHg) y diastólica arterial si la tienes.
Aplicación práctica
Mesa plana y activa modo RCP si está disponible.
Coloca la tabla solo si el equipo domina la inserción sin pausar (durante ventilación o relevo).
Desfibrilación con pausa mínima cuando corresponda; relevos cada 2 min.
Ajusta ventilación (evita hiperventilar) y considera desinsuflar si hay neumoperitoneo.
Mensaje final
La tabla suma milímetros; la perfusión sostenida salva.
🧠 Descripción científico–profesional, imagen por imagen
(Enfoque: RCP intraoperatoria — nivel Dios, medicina perioperatoria y reanimación avanzada)
Imagen 1 — “Tabla rígida al hacer RCP en quirófano: ¿cuándo usar?”
Se observa un quirófano activo durante un paro cardiorrespiratorio intraoperatorio.
- Paciente: adulto inconsciente en posición supina sobre una mesa quirúrgica con colchón blando de soporte de aire o espuma de presión negativa.
- Equipo: al menos cuatro profesionales sanitarios (anestesiólogo, cirujanos, instrumentista, enfermería).
- Detalle crítico: la profesional pelirroja expresa “¡No logro profundidad suficiente!”, aludiendo a pérdida de eficacia mecánica de las compresiones torácicas debido al colchón. El otro profesional sugiere introducir la “tabla rígida”.
- Monitoreo: ECG continuo con trazado aplanado y signos de perfusión comprometida, EtCO₂ bajo (≈8–10 mmHg), saturación y presión arterial no invasiva visibles.
- Relevancia fisiológica: la compresión esternal sobre superficie blanda se traduce en pérdida de milímetros de desplazamiento real y menor presión de perfusión coronaria (PPC), clave para retorno a circulación espontánea (ROSC).
Imagen 2 — “¡Esto no funciona!”
Escenario avanzado de paro cardíaco con RCP en curso:
- Compresiones manuales: ejecutadas con esfuerzo máximo, pero sobre colchón blando.
- Texto: “El colchón absorbe energía – se pierden milímetros”. Explica la transmisión deficiente de la fuerza ejercida; la energía se disipa en el material del colchón, reduciendo desplazamiento esternal efectivo y, por tanto, volumen sistólico generado.
- Parámetro crítico: EtCO₂ monitorizado (capnografía continua) como indicador indirecto de flujo sanguíneo durante RCP; valores bajos (<10 mmHg) implican perfusión inadecuada.
- Relevo compresor: cronómetro señalando cambio cada 30 segundos (recomendado para evitar fatiga y mantener profundidad ≥5 cm a 100–120/min).
Imagen 3 — “Colocarla puede recuperar milímetros y EtCO₂”
Representa el momento en que se coloca la tabla rígida bajo el paciente:
- Efecto fisiológico: superficie firme aumenta transmisión de fuerza, mejora profundidad real y presión intratorácica; esto eleva el EtCO₂ (surge en monitor como EtCO₂ rising).
- Mensaje: beneficio modesto pero cuantificable — ganar milímetros de compresión útil y mejorar PPC.
- Indicador clave: EtCO₂ es el “biomarcador dinámico” que refleja mejora de flujo pulmonar y gasto cardíaco durante RCP. Su incremento tras optimizar superficie implica mejor calidad de compresiones.
Imagen 4 — “Base firme sí, pausas no”
Discusión de equipo quirúrgico avanzado sobre decisión de colocar tabla rígida:
- Algoritmo mental:
- Base firme: usar tabla si colchón absorbe energía.
- Continuidad: no justificar pausas prolongadas (>10–15 s) para insertarla, pues cada interrupción reduce presión de perfusión coronaria y probabilidad de ROSC.
- Contexto quirúrgico: cuando el paciente ya está en mesa operatoria, debe considerarse también desinsuflar neumoperitoneo o ajustar soporte ventilatorio para optimizar hemodinámica.
- Roles definidos: líder de RCP (coordinador de tiempos, EtCO₂ y hemodinamia), equipo anestesia/cirugía gestionando vía aérea, monitorización invasiva y fármacos.
🔬 Integración fisiopatológica
- Superficie firme = profundidad real: cada cm perdido reduce flujo coronario y cerebral. La PPC (diastólica ≥25 mmHg) y EtCO₂ ≥10–15 mmHg son marcadores pronósticos directos de calidad RCP.
- Tabla rígida: útil si se coloca rápido y sin interrumpir más de 10–15 s; ideal durante cambio de reanimador o ventilación.
- Monitorización avanzada: capnografía y presión arterial invasiva son brújulas fisiológicas para guiar reanimación intraoperatoria.
💡 Mensaje clave
La tabla rígida no es protagonista, pero puede mejorar la mecánica y perfusión si se aplica sin comprometer continuidad.
- Prioridad absoluta: compresiones efectivas y sostenidas con EtCO₂ y PPC como feedback en tiempo real.
- Secundario pero útil: tabla rígida, mesa en modo RCP, desfibrilación precoz y coordinación de equipo quirúrgico.
Lee el artículo completo con la evidencia y los “cómo” paso a paso:
👉 https://rafaherreraacpv.substack.com/p/tabla-rigida-en-paro-intraoperatorio
RCP intraoperatoria y tabla rígida: herramienta útil pero no protagonista
Autor: DrRamonReyesMD — 2025
1. Introducción
El paro cardiorrespiratorio intraoperatorio (PCR-I) es un evento crítico que exige reanimación inmediata y sin interrupciones. En quirófano, el entorno cambia radicalmente las condiciones habituales de la RCP extrahospitalaria: el paciente suele estar en posición supina sobre mesas acolchadas o colchones antiescaras/aire, con abdomen insuflado o acceso quirúrgico abierto, y monitorización avanzada disponible (capnografía, presión arterial invasiva, gases, etc.). Estas circunstancias influyen en la profundidad real de las compresiones torácicas, la perfusión coronaria y cerebral y, por ende, en el éxito del retorno a la circulación espontánea (ROSC).
Entre los dispositivos propuestos para optimizar la RCP intraoperatoria, la tabla rígida ha suscitado debate: ¿aporta beneficios significativos? ¿cuándo vale la pena introducirla?
2. Principios fisiológicos de la compresión torácica efectiva
- Profundidad y retroceso completo:
La AHA 2025 y el European Resuscitation Council (ERC) mantienen como estándar 5–6 cm de compresión esternal a 100–120/min, con retroceso completo para permitir retorno venoso. - Presión de perfusión coronaria (PPC):
PPC ≥25 mmHg correlaciona con mayor probabilidad de ROSC. Cada interrupción prolongada hace caer la PPC y requiere varias compresiones para restaurarla. - EtCO₂ como brújula fisiológica:
EtCO₂ ≥10–15 mmHg indica flujo sanguíneo pulmonar adecuado y mejor gasto cardíaco durante compresiones. Es un marcador pronóstico en tiempo real y guía de calidad.
3. Problema: superficie blanda de quirófano
Las mesas quirúrgicas suelen tener colchones blandos, de gel o aire, que absorben parte de la fuerza aplicada, reducen el desplazamiento efectivo del esternón y disminuyen el gasto cardíaco generado. Estudios con sensores de presión han mostrado pérdidas de 5–10 mm de profundidad real sobre colchones blandos. Esta pérdida se traduce en menor PPC y EtCO₂.
4. Tabla rígida: fundamento y evidencia
- Mecánica: Al colocar una tabla rígida bajo el paciente se logra disipación mínima de energía, aumentando la transmisión de la fuerza vertical.
- Beneficio cuantificable: Mejora modesta pero real de la profundidad efectiva (ganancia media de 5–8 mm) y, en consecuencia, aumento de EtCO₂.
- Guías 2025: Tanto AHA como ERC recomiendan superficie firme siempre que sea posible, pero enfatizan que no debe retrasarse la RCP para colocar dispositivos.
- Contexto quirúrgico: En cirugía abdominal, la insuflación de neumoperitoneo reduce el retorno venoso y dificulta compresiones. Desinsuflar puede ser más prioritario que la tabla rígida.
5. Aplicación práctica intraoperatoria
Algoritmo clínico:
-
Evaluación inicial:
- Si la mesa tiene función “modo RCP” (rigidización eléctrica), activarla inmediatamente.
- Si no, considerar tabla rígida solo si el equipo la domina y puede colocarla sin pausa significativa (<10–15 s).
-
Monitorización avanzada:
- Observar EtCO₂ (meta ≥10–15 mmHg).
- Si disponible, presión diastólica invasiva ≥25 mmHg como predictor de ROSC.
-
Técnica de colocación segura:
- Durante un relevo de compresiones o una ventilación, deslizar tabla sin levantar paciente.
- Evitar interrupciones >15 s; cada segundo sin compresión disminuye PPC.
-
Otros ajustes fisiológicos críticos:
- Evitar hiperventilación (mantener ETCO₂ 10–20 mmHg).
- Si neumoperitoneo presente, desinsuflar para mejorar retorno venoso y mecánica torácica.
- Relevo del compresor cada 2 min para evitar fatiga.
-
Desfibrilación:
- Realizar con pausa mínima; usar parches autoadhesivos ya puestos si posible.
6. Mensaje central para quirófano
- La tabla rígida suma milímetros de compresión útil, pero la prioridad es continuidad y perfusión.
- Base firme: sí; pausas: nunca.
- EtCO₂ y presión diastólica son brújulas fisiológicas superiores a la sensación subjetiva de profundidad.
- Si colocar la tabla implica detener compresiones más de 10–15 s, NO vale la pena.
7. Conclusiones
La tabla rígida intraoperatoria es un coadyuvante útil para optimizar la transmisión de fuerza y mejorar indicadores de flujo (EtCO₂, PPC). Su beneficio es modesto pero real, y debe sopesarse frente al riesgo de interrupciones prolongadas. En quirófano, donde existen herramientas avanzadas (monitorización invasiva, capnografía, control de neumoperitoneo y mesa RCP), la decisión es contextual y guiada por parámetros fisiológicos, no por rutina.






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