Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en el blog EMS Solutions International está editada y elaborada por profesionales de la salud. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario. by Dr. Ramon REYES, MD
Niveles de Alerta Antiterrorista en España. Nivel Actual 4 de 5.
La coagulopatía es una de las principales causas de muerte prevenible en pacientes traumatizados.
Hasta el 35% de los pacientes con traumatismos ingresados en el Departamento de Accidentes y Emergencias presentan coagulopatía, a menudo debido a una hemorragia grave.
En condiciones no coagulopáticas, el cuerpo responde a una hemorragia grave inducida por un trauma activando vías de coagulación complejas, comúnmente denominadas vías de coagulación intrínsecas y extrínsecas o cascada de coagulación.
Durante la activación de la cascada de la coagulación, se liberan secuencialmente varios factores de la coagulación, lo que da como resultado la formación de un coágulo estable.
Sin embargo, la formación del coágulo se vuelve ineficaz en condiciones de coagulopatía, lo que da como resultado un coágulo inestable o un coágulo ausente y sangrado continuo.
Los hemostáticos de Celox funcionan de forma totalmente independiente de la cascada de coagulación natural del cuerpo, lo que permite la formación de un seudocoágulo resistente independientemente de la coagulopatía del paciente.
El modo de acción de algunos otros hemostáticos funciona junto con la cascada de coagulación natural del cuerpo, que puede ser ineficaz o tener un efecto retardado si son coagulopáticos.
A la hora de elegir la pinza hemostática más adecuada, es fundamental conocer cómo funcionan y en qué circunstancias pueden perder eficacia.
#MSPGastroenterología | En el marco del día mundial de la enfermedad #inflamatoria#intestinal (EII), se busca concientizar a la población de que esta condición digestiva es grave y crónica.
Estas enfermedades autoinmunes tienen un gran impacto en la sociedad, ya que afectan en gran medida la calidad de vida de las personas que la padecen.
Aprende más sobre estas dos afecciones de las EII con esta infografía o en https://lnkd.in/dSunwEi
#MSP: Lo más relevante para médicos, pacientes y profesionales de la salud. #Pioneros
Go back to the basics with a thorough understanding of pediatric appearance, breathing and circulation warning signs, and the cardinal rule of pediatric assessment
The examination of the pediatric patient begins before even touching the patient. (Photo/Getty Images)
Bienvenido a nuestro centro de entrenamiento en línea. Una herramienta sencilla y fácil de usar. Se entrenará a través de videos, al finalizar cada uno se llevará a cabo un examen de tres preguntas. El tiempo estimado del curso es de tan solo 30 minutos. Al finalizar la serie de videos y preguntas Usted recibirá un certificado con una firma, que acredita que ya tiene el conocimiento necesario en la parte teórica. El siguiente paso es efectuar un entrenamiento práctico con un evaluador certificado quien podrá comprobar sus habilidades, al finalizar obtendrá la segunda firma para su certificado. El evaluador designado por su agencia, utilizará la última página de la
guía de estudio para evaluar y comprobar las habilidades de cada estudiante.
X-Collars: Harm or Good by Jon Puryear
de Emegear, LLC./ a través de Vimeo Desktop Uploader
X-COLLAR PLUS
Como bien sabemos, la inmovilización de la columna cervical en una víctima que ha sido poli traumatizada, es una de las maniobras más simples e importantes que puede realizar el rescatista. En el comienzo de la atención al paciente, esto se logra realizando una correcta inmovilización con ambas manos, pero al transcurrir el tiempo y avanzarse más en el tratamiento, esta inmovilización manual deberá ser reemplazada por una dispositivo comúnmente llamado collar/collarín de inmovilización cervical.
En este caso, hablaremos sobre un pequeño test que realizamos del innovador producto que EmeGear ha lanzado al mercado. El XCollar.
Todos los collares cervicales tienen serias limitaciones al restringir el movimiento de la columna cervical, ya sean movimientos de lateralización o o rotación; es por eso que deben ser utilizados en conjunto con inmovilizadores laterales, que complementan la restricción de movimientos. En el GOER, ya hemos hablado más en profundidad sobre estos temas anteriormente (Ver notas aquí 1 – 2). Sin embargo, este nuevo modelo de collar cervical, el XCollar, brinda una inmovilización casi ideal. Su diseño permite una restricción de los movimientos cervicales por encima de la 1er. vértebra cervical (atlas) y bien por debajo de la séptima, combinando una seguridad óptima con un confort superlativo para el paciente. Es importante recalcar que no en todos los casos, es necesaria una inmovilización cervical. Sin embargo, recuerde: ANTE LA DUDA, INMOVILICE AL PACIENTE.
10 Consejos para leer (y entender) un articulo científico by INMEGEN
Si estás a punto de leer un artículo científico, ya sea por deber, gusto o curiosidad, no puedes perderte estos consejos que el #DrGecko tiene para ti.
¿Quieres conocer el otro lado de la moneda? Entonces aprende a escribir y publicar tu propio trabajo: http://bit.ly/2xnHl8r
Del ingl. resilience, y este der. del lat. resiliens, -entis, part. pres. act. de resilīre 'saltar hacia atrás, rebotar', 'replegarse'.
1. f. Capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos.
2. f. Capacidad de un material, mecanismo o sistema para recuperar su estado inicial cuando ha cesado la perturbación a la que había estado sometido.
¿Sabes qué es la resiliencia? ¿Quieres aprender a ser una persona resiliente?
A veces la vida nos pone a prueba, nos plantea situaciones que superan nuestras capacidades: una enfermedad, una ruptura de pareja particularmente dolorosa, la muerte de un ser querido, el fracaso de un sueño largamente anhelado, problemas económicos o una pandemia como el COVID-19…
Existen diferentes circunstancias que nos pueden llevar al límite y hacer que nos cuestionemos si tenemos la fuerza y la voluntad necesarias para continuar adelante. En este punto tenemos dos opciones: dejarnos vencer y sentir que hemos fracasado o sobreponernos y salir fortalecidos, apostar por la resiliencia.
Qué es la resiliencia: definición y significado
El significado de resiliencia, según la definición de la Real Academia Española de la Lengua (RAE) es la capacidad humana de asumir con flexibilidad situaciones límite y sobreponerse a ellas, pero en psicología añadimos algo más al concepto de resiliencia: no sólo gracias a ella somos capaces de afrontar las crisis o situaciones potencialmente traumáticas , sino que también podemos salir fortalecidos de ellas.
La resiliencia implica reestructurar nuestros recursos psicológicos en función de las nuevas circunstancias y de nuestras necesidades. De esta manera, las personas resilientes no solo son capaces de sobreponerse a las adversidades que les ha tocado vivir, sino que van un paso más allá y utilizan esas situaciones para crecer y desarrollar al máximo su potencial.
Para las personas resilientes no existe una vida dura, sino momentos difíciles. Y no se trata de una simple disquisición terminológica, sino de una manera diferente y más optimista de ver el mundo, ya que son conscientes de que después de la tormenta llega la calma. De hecho, estas personas a menudo sorprenden por su buen humor y nos hacen preguntarnos cómo es posible que, después de todo lo que han pasado, puedan afrontar la vida con una sonrisa en los labios.
El origen del concepto de resiliencia en psicología
El primer autor que empleó este término fue John Bowlby, el creador de la teoría del apego, pero fue Boris Cyrulnik, psiquiatra, neurólogo, psicoanalista y etólogo, el que dio a conocer el concepto de resiliencia en el campo de la psicología en su bestseller “Los patitos feos”.
La práctica de la resiliencia: ¿Cómo podemos ser más resilientes?
La resiliencia no es una cualidad innata, no está impresa en nuestros genes, aunque sí puede haber una tendencia genética que puede predisponer a tener un “buen carácter”. La resiliencia es algo que todos podemos desarrollar a lo largo de la vida.
resiliencia practica
Hay personas que son resilientes porque han tenido en sus padres o en alguien cercano un modelo de resiliencia a seguir, mientras que otras han encontrado el camino por sí solas. Esto nos indica que todos podemos ser resilientes, siempre y cuando cambiemos algunos de nuestros hábitos y creencias.
De hecho, las personas resilientes no nacen, se hacen, lo cual significa que han tenido que luchar contra situaciones adversas o que han probado varias veces el sabor del fracaso y no se han dado por vencidas. Al encontrarse al borde del abismo, han dado lo mejor de sí y han desarrollado las habilidades necesarias para enfrentarse a los diferentes retos de la vida.
¿Qué caracteriza a una persona resiliente?
Las personas resilientes practican estos 12 hábitos:
Son conscientes de sus potencialidades y limitaciones. El autoconocimiento es un arma muy poderosa para enfrentar las adversidades y los retos, y las personas resilientes saben usarla a su favor. Estas personas saben cuáles son sus principales fortalezas y habilidades, así como sus limitaciones y defectos. De esta manera pueden trazarse metas más objetivas que no solo tienen en cuenta sus necesidades y sueños, sino también los recursos de los que disponen para conseguirlas.
Son creativas. La persona con una alta capacidad de resiliencia no se limita a intentar pegar el jarrón roto, es consciente de que ya nunca a volverá a ser el mismo. El resiliente hará un mosaico con los trozos rotos, y transformará su experiencia dolorosa en algo bello o útil. De lo vil, saca lo precioso.
Confían en sus capacidades. Al ser conscientes de sus potencialidades y limitaciones, las personas resilientes confían en lo que son capaces de hacer. Si algo les caracteriza es que no pierden de vista sus objetivos y se sienten seguras de lo que pueden lograr. No obstante, también reconocen la importancia del trabajo en equipo y no se encierran en sí mismas, sino que saben cuándo es necesario pedir ayuda.
Asumen las dificultades como una oportunidad para aprender. A lo largo de la vida enfrentamos muchas situaciones dolorosas que nos desmotivan, pero las personas con un alto nivel de resiliencia son capaces de ver más allá de esos momentos y no desfallecen. Estas personas asumen las crisis como una oportunidad para generar un cambio, para aprender y crecer. Saben que esos momentos no serán eternos y que su futuro dependerá de la manera en que reaccionen. Cuando se enfrentan a una adversidad se preguntan: ¿qué puedo aprender yo de esto.
Practican el mindfulness o conciencia plena. Aún sin ser conscientes de esta práctica milenaria, las personas resilientes tienen el hábito de estar plenamente presentes, de vivir en el aquí y ahora y de tienen una gran capacidad de aceptación. Para estas personas el pasado forma parte del ayer y no es una fuente de culpabilidad y zozobra mientras que el futuro no les aturde con su cuota de incertidumbre y preocupaciones. Son capaces de aceptar las experiencias tal y como se presentan e intentan sacarles el mayor provecho. Disfrutan de los pequeños detalles y no han perdido su capacidad para asombrarse ante la vida.
Ven la vida con objetividad, pero siempre a través de un prisma optimista. Las personas resilientes son muy objetivas, saben cuáles son sus potencialidades, los recursos que tienen a su alcance y sus metas, pero eso no implica que no sean optimistas. Al ser conscientes de que nada es completamente positivo ni negativo, se esfuerzan por centrarse en los aspectos positivos y disfrutan de los retos. Estas personas desarrollan un optimismo realista, también llamado optimalismo, y están convencidas de que por muy oscura que se presente su jornada, el día siguiente puede ser mejor.
Se rodean de personas que tienen una actitud positiva. Las personas que practican la resiliencia saben cultivar sus amistades, por lo que generalmente se rodean de personas que mantienen una actitud positiva ante la vida y evitan a aquellos que se comportan como vampiros emocionales. De esta forma, logran crear una sólida red de apoyo que les puede sostener en los momentos más difíciles.
No intentan controlar las situaciones, sino sus emociones. Una de las principales fuentes de tensiones y estrés es el deseo de querer controlar todos los aspectos de nuestra vida. Por eso, cuando algo se nos escapa de entre las manos, nos sentimos culpables e inseguros. Sin embargo, las personas con capacidad de resiliencia saben que es imposible controlar todas las situaciones, han aprendido a lidiar con la incertidumbre y se sienten cómodos aunque no tengan el control. Se centran en cambiar sus emociones, cuando no pueden cambiar la realidad.
Son flexibles ante los cambios. A pesar de que las personas resilientes tienen una autoimagen muy clara y saben perfectamente qué quieren lograr, también tienen la suficiente flexibilidad como para adaptar sus planes y cambiar sus metas cuando es necesario. Estas personas no se cierran al cambio y siempre están dispuestas a valorar diferentes alternativas, sin aferrarse obsesivamente a sus planes iniciales o a una única solución.
Son tenaces en sus propósitos. El hecho de que los resilientes sean flexibles no implica que renuncien a sus metas, al contrario, si algo las distingue es su perseverancia y su capacidad de lucha. La diferencia estriba en que no luchan contra molinos de viento, sino que aprovechan el sentido de la corriente y fluyen con ella. Estas personas tienen una motivación intrínseca que les ayuda a mantenerse firmes y luchar por lo que se proponen.
Afrontan la adversidad con humor. Una de las características esenciales de las personas resilientes es su sentido del humor, son capaces de reírse de la adversidad y sacar una broma de sus desdichas. La risa es su mejor aliada porque les ayuda a mantenerse optimistas y, sobre todo, les permite enfocarse en los aspectos positivos de las situaciones.
Buscan la ayuda de los demás y el apoyo social. Cuando las personas resilientes pasan por un suceso potencialmente traumático su primer objetivo es superarlo, para ello, son conscientes de la importancia del apoyo social y no dudan en buscar la ayuda de un buen psicólogo cuando lo necesitan.
La resiliencia en los niños
Si queremos que nuestros hijos afronten las dificultades de la vida con fortaleza es importante construir un apego seguro y educarles en la capacidad de ser resilientes, para ello es fundamental nuestro ejemplo, no sobreprotegerles y sobre todo creer en ellos.
resiliencia niños
No se trata de evitar que se caigan, sino de enseñarles a levantarse, y para ello tenemos que confiar en que ellos pueden. Por supuesto, tampoco se trata de exponerles a peligros o ambientes agresivos “para que se hagan más fuertes”, afortunadamente no estamos en Esparta. Aportar seguridad y protección es necesario.
Algo importante que podemos preguntarles a los niños cuando tienen un contratiempo si queremos que aprendan a desarrollar la resiliencia es ¿qué puedes aprender de esto? o ¿qué puedes sacar bueno de esto que ha ocurrido?
Enseñar a los niños a relativizar y a ver los errores y los contratiempos como una oportunidad para aprender y mejorar les guiará por el camino de la resiliencia, pero no desde la negación de sus emociones, sino desde empatía hacia lo que sienten y su mundo emocional, transmitiéndoles nuestra confianza en que ellos pueden afrontar la adversidad y superarla.