🇺🇸👩🏻🦯😧😱Desde niña, Jewel Shuping, de Carolina del Norte, soñaba con vivir en la oscuridad total. A los 21 años, diagnosticada con Trastorno de Identidad de la Integridad Corporal, llevó ese deseo al límite: con la ayuda de una psicóloga, vertió limpiador de desagües en sus ojos, provocándose daños irreversibles que la dejaron ciega. Su decisión estremeció a su entorno; su familia la rechazó y su historia generó polémica en todo el país. Pese a las consecuencias y al dolor, Jewel asegura que no se arrepiente: por primera vez, sentía que su cuerpo reflejaba quién era realmente.
Créditos Conocimientum
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