Se presenta el caso de una mujer de 26 años que fue remitida al servicio de obstetricia y ginecología por dolor abdominal bajo con palpitaciones asociadas, mareos, falta de apetito e insomnio de siete meses de evolución. Su historial obstétrico y ginecológico era normal, como el ciclo menstrual (28 días) y regular con una duración del período menstrual de 4-5 días.
Al examen se reveló masa infraumbilical, móvil y endurecida. Los hallazgos de laboratorio estaban dentro de los límites normales.Se obtuvo una ecografía que mostró claramente un útero vacío, ovarios regulares y la presencia de medición de longitud de fémur (embarazo abdominal) y retención de 5 años. Después de la laparotomía, se observó un feto dentro del saco en la cavidad peritoneal adherido con el epiplón de un feto abdominal de 30 semanas.
Después de la disección del saco se encontró un feto completo con esqueleto osificado. El feto estaba intacto dentro de la cavidad amniótica sin líquido amniótico (Embarazo Abdominal Calcificado-Litopedión).
Lithopedion es un término derivado de las palabras griegas Litho (Piedra) y Paedion (niño) y explica un feto muerto extrauterino que se ha calcificado. Hay feto muerto extrauterino que se ha calcificado.
En el caso de los bebés de piedra, el feto fallecido no tiene forma de salir del cuerpo y es demasiado grande para que el cuerpo lo reabsorba. En lugar de permitir que el feto se pudra dentro del abdomen y exponga a la madre a una posible infección, su cuerpo trabaja para calcificarlo o momificarlo en calcio. La calcificación es esencialmente una acumulación de sales que el cuerpo humano utiliza como barrera contra posibles infecciones.
Una vez calcificado, el feto se deja dentro de la madre, donde no suele causar ninguna complicación.
Este embarazo se desarrolla como un embarazo intrauterino abdominal hasta la muerte fetal. Posteriormente se produce la deshidratación de los tejidos y la infiltración de calcio. La mujer tuvo una buena recuperación postoperatoria después de la extracción.
¿Qué es el litopedion?
Su nombre proviene de las palabras griegas “litho”, piedra, y “pedion”, niño y se trata de un fenómeno que aparece en uno de cada 20000 embarazos. Litopedion significa literalmente bebé de piedra.
Este fenómeno ocurre cuando un embrión se adhiere a cualquier lugar fuera del útero y el feto crece, durante más de 12 semanas, pero no consigue sobrevivir y muere finalmente. Si el feto es demasiado grande, no se expulsa ni absorbe, sino que comienza a calcificarse.
Imagen: Bebé de piedra
La calcificación se produce por vía subcutánea y se envuelve en tejido cicatrizal. Se deshidratan los tejidos, se infiltra calcio y se inicia el proceso de petrificación. Se requiere para ello que existan condiciones asépticas y que se den las condiciones óptimas para la precipitación del calcio.
Si este proceso es asintomático y pasa desapercibido por los médicos, el feto se momifica y acaba convirtiéndose en un bebé de piedra, también conocido como litopedio. Es posible que no se diagnostique durante décadas y que se detecte por una revisión debida a otros motivos.
Existen diferentes tipos de litopedion:
Litokeliposis: se calcifica la membrana del óvulo. El feto puede estar en diferentes etapas de descomposición.
Litokelitopedion: tanto el feto como las membranas del óvulo están calcificadas.
Litopedion común: sólo el feto está calcificado.
Aunque parezca tratarse de un mito, son casos muy raros pero reales. Existen menos de 300 casos documentados en la literatura médica acumulada durante más de 400 años.
El diagnóstico de litopedion es poco frecuente debido a la detección temprana de embarazos abdominales, a pesar de que los embarazos extrauterinos son cada vez más comunes.
https://www.reproduccionasistida.org/litopedion-bebes-de-piedra/
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La mujer tuvo un embarazo ectópico que no se desarrolló correctamente y al mismo tiempo llevaba un embarazo normal de 6 semanas dentro de su útero.
Luisa Ochoa
Una mujer embarazada de 28 años, con antecedentes de salud de tres embarazos y un parto, sin abortos, se presentó al Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital General de Bengo, afirmando que estaba grávida desde hace tres años y presentaba ausencia de la menstruación durante los últimos dos meses.
En la evaluación física general no evidenciaron alteraciones en su salud, sin embargo, a nivel regional, en el abdomen, se observó en la porción superior de la zona asimétrica, (corroborándose a la palpación) una tumoración alargada y dura, de consistencia pétrea de más menos 30 centímetros en proyección de epigastrio e hipocondrio derecho, no movible y no dolorosa.
En el examen ginecológico se encontró al tacto vaginal un útero aumentado de tamaño, blando, con signos subjetivos de embarazo de aproximadamente 6 semanas y anejos normales.
Ante los hallazgos se sugirió a la paciente la realización de una ecografía abdominal y ginecológica, sospechando la presencia de una gravidez del primer trimestre y un tumor abdominal de causa no ginecológica.
Los exámenes revelaron la presencia de un feto intrabdominal calcificado
La ecografía ginecológica reveló un embarazo de aproximadamente 6 semanas con un embrión único y latido cardíaco presente, mientras que la ecografía abdominal mostró un feto en proyección abdominal alta con latido cardíaco ausente (litopedion).
Es decir, que la mujer de 28 años tuvo un embarazo ectópico que no se desarrolló correctamente y donde el feto se calcificó en su cuerpo. Al mismo tiempo, también llevaba un embarazo normal de 6 semanas dentro de su útero.
Los médicos que atendieron a la paciente decidieron realizar una laparotomía, encontrándose un feto calcificado en la porción superior del abdomen con adherencias al intestino, epiplón, hígado y estómago, que fueron liberadas, y un útero grávido pequeño con estructura anatómica normal.
Posteriormente, se dejó un drenaje por 48 horas, con una evolución satisfactoria. El postoperatorio inmediato transcurrió sin complicaciones, dándose alta a la paciente a los 7 días.
La paciente continuó su seguimiento en el servicio de atención prenatal del Hospital General de Bengo, con seguimiento especializado y por ultrasonografía, presentando posteriormente un parto normal con un recién nacido femenino con buen peso a las 39 semanas de gestación.
Sobre el litopedión o literalmente ´bebé de piedra´
El litopedion es una rara consecuencia del embarazo abdominal, donde, por pasar asintomático y escaparse al diagnóstico médico, el feto o sus membranas entran en un proceso de petrificación.
En la literatura científica actual se han descrito numerosos casos de gravidez ectópica abdominal, en el mesenterio, bazo, hígado, vejiga, pared uterina, abdominal y ligamentos abdominales, con pocas semanas hasta el término del embarazo.
Los casos de litopedion, generalmente, son hallazgos casuales durante la realización de exámenes radiológicos o ultrasonográficos, como es el caso de la paciente embarazada de 28 años.
El litopedion es una rara consecuencia del embarazo ectópico
Diferentes autores reportan que el litopedion es una rara consecuencia del embarazo ectópico abdominal. Puede sospecharse en pacientes con antecedentes de haber presentado un embarazo y con cuadros raros de dolor abdominal recurrente o persistente, u otros síntomas gastrointestinales, o en ocasiones el hecho de una gestante llegar a término sin cambios cervicales y muerte fetal, hacen sospechar la presencia de un embarazo abdominal, sobre todo si se asocia con inducción fallida.
En el caso reportado existe la particularidad de no haberse encontrado reporte en la literatura de esta entidad acompañada con un embarazo ectópico, por lo que se considera un caso inédito.
Acceda al caso
Figura 1. Radiografía que muestra feto y las membranas del saco amniótico calcificadas en posición longitudinal y presentación pélvica. |
Figura 2. Tomografía computarizada, corte coronal, ventana
de partes flexibles, evidenciando la presencia de imágenes
calcificadas groseras, siendo una intrauterina (flecha blanca)
y otra parauterina a la derecha (flecha negra).
Figura 3. Tomografía computadorizada, corte axial, ventana
de hueso. Presencia de saco gestacional intraabdominal de
paredes calcificadas cuyo feto se encuentra en situación
longitudinal y presentación pélvica, edad gestacional estimada
de 29-30 semanas según medidas óseas. El fémur se visualiza
longitudinalmente (flecha blanca).
de partes flexibles. Presencia de saco gestacional intraabdominal
de paredes calcificadas (flecha blanca) cuyo feto se encuentra
en situación longitudinal y presentación pélvica con edad
gestacional estimada en 29-30 semanas.
Dr. Ramon Reyes, MD ∞🧩
Figura 5. Tomografía computarizada con reconstrucción
en 3D. Visualización del feto en situación longitudinal y
presentación pélvica en la cavidad abdominal.
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