La Campana del Zar (Tsar Kólokol) es la campana más grande del mundo, ubicada en el Kremlin de Moscú. Fundida entre 1733 y 1735 por Iván Motorin y su hijo, pesa 202 toneladas y nunca ha sonado debido a un daño sufrido en un incendio en 1737. A pesar de su imponente tamaño, fue colocada en un pedestal en 1836 y se ha convertido en un símbolo de la artesanía rusa. Su historia refleja la ambición de los monarcas rusos por crear obras monumentales.
Campana del Zar nunca ha sonado porque sufrió un daño significativo durante un incendio en 1737, poco después de ser fundida. Este incendio provocó que la campana cayera de su soporte y se rompiera, impidiendo su uso posterior. Aunque se consideró la posibilidad de reparar el trozo roto, se determinó que no podría sonar normalmente debido al daño sufrido. Desde entonces, ha permanecido como una pieza monumental en el Kremlin, simbolizando la grandeza de la artesanía rusa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario