La espirometría es la prueba más utilizada para medir la función pulmonar y es una herramienta de trabajo fundamental en la consulta de Atención Primaria (AP) para el diagnóstico y seguimiento de la patología respiratoria. La espirometría forzada aporta información del volumen de aire movilizado por los pulmones en función del tiempo, en circunstancias controladas, y va a determinar la obstrucción al flujo aéreo.
Se trata de una prueba accesible, disponible en AP, económica y no invasiva. Sin embargo, presenta ciertas limitaciones porque precisa de la colaboración del paciente y el entrenamiento del personal sanitario para su realización, requiriendo formación y experiencia técnica para obtener resultados óptimos. El objetivo de esta guía de bolsillo es alentar a los profesionales de AP a aumentar el uso de la espirometría por ser una prueba sencilla y de gran utilidad en la práctica diaria.
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