influencia de la dieta mediterránea en los trastornos autoinmunes tiroideos (TAT), como la tiroiditis de Hashimoto y la enfermedad de Graves.

 

La imagen compara los efectos de la dieta mediterránea y la dieta occidental sobre la autoinmunidad tiroidea, destacando los mecanismos nutricionales que pueden influir en esta condición.

Dieta Mediterránea

Incluye:

Cereales integrales, vegetales, frutas y legumbres

Vino tinto (consumo moderado)

Pescado azul pequeño

Efectos protectores:

Mejora la composición de la microbiota intestinal

Actividad antioxidante gracias a los componentes vegetales y al resveratrol del vino tinto

Ácidos grasos poliinsaturados (PUFA) del pescado, que tienen propiedades antiinflamatorias

Estos factores disminuyen la probabilidad de desarrollar autoinmunidad tiroidea mediante la reducción del estrés oxidativo y la modulación inmune.

Dieta Occidental

Incluye:

Productos animales (como carnes rojas y procesadas)

Alimentos ultraprocesados (como donas, papas fritas, etc.)

Efectos perjudiciales:

Mayor producción de especies reactivas de oxígeno (ROS), que favorecen procesos inflamatorios y autoinmunes

Exposición a nitritos en los ultraprocesados, lo que también estimula el estrés oxidativo

Estos efectos contribuyen a favorecer la autoinmunidad tiroidea, deteriorando la homeostasis redox y promoviendo una disfunción inmune.

Conclusión

Gracias a sus componentes nutricionales, la dieta mediterránea influye positivamente sobre la microbiota intestinal, el equilibrio redox y el sistema inmune, lo cual podría convertirla en una herramienta eficaz dentro de un enfoque de nutrición de precisión para la prevención y el manejo de trastornos autoinmunes tiroideos.

 publicado en la revista Nutrients en 2023, analiza la influencia de la dieta mediterránea en los trastornos autoinmunes tiroideos (TAT), como la tiroiditis de Hashimoto y la enfermedad de Graves.

Principales hallazgos

1. Efectos beneficiosos de la dieta mediterránea (DM):

Estos componentes ayudan a mantener la homeostasis redox, modulan el sistema inmunológico y favorecen una microbiota intestinal saludable, lo que puede reducir la inflamación y la autoinmunidad tiroidea.

2. Comparación con la dieta occidental (DO):

La DO, caracterizada por un alto consumo de grasas saturadas, azúcares refinados y alimentos ultraprocesados, se asocia con un aumento del estrés oxidativo, disbiosis intestinal y una respuesta inflamatoria crónica, factores que pueden contribuir al desarrollo de TAT.

3. Enfoque de nutrición de precisión:

Conclusión

Para más detalles, puedes consultar el artículo completo en el siguiente enlace: https://www.mdpi.com/2072-6643/15/18/3953.