En el año 2013, Doctores salvan la mano de un hombre al implantarla en una de sus piernas.
Cirujanos chinos lograron salvar la mano de un hombre que fue amputada en un accidente laboral con una hoja giratoria. Debido a la gran pérdida de tejido y la grave afectación de los vasos, la mano cortada de forma traumática no se pudo reimplantar de inmediato al antebrazo del paciente, ya que los nervios y los tendones cortados necesitaban tiempo para sanar antes de unirlos de nuevo a la extremidad.
Por este motivo su mano debió permanecer durante un mes insertada en su pierna. Después de este tiempo, la mano se reimplantó en su ubicación correcta. La sensibilidad de la mano regresó, pero necesitó meses de rehabilitación para poder volver a la normalidad.
Los Doctores realizaron una operación similar en el 2004, injertaron una mano en el abdomen de un paciente, la operación también fue un éxito.
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